10 junio 2009

                            SUIKEI


          Caen los pétalos
y el corazón de los hombres
consigue sosegarse.

          Ahora que no cae ni un  pétalo,
justamente ahora,
oh tiempo, ¡detente!

            BOSQUES

Siempre he intentado percibir esa esencia viva de los árboles.
Un árbol es como una ventana, un objetivo y así ellos nos enseñan entre sus espesas y altas copas pequeños fragmentos de nuestro cielo.
Su fuerza hace fondear y anclar sus raíces en la profundidad de la tierra para después crecer y crecer buscando esa luz dorada de vida y querer llegar a lo más alto como si quisieran llegar a tocar el azul del cielo.El verdor en el bosque es exuberante; su verde suave, fresco,esa brisa ... nos gusta nos llena, casi diría que nos seduce que nos invita para hacernos sentir ser uno más entre ellos.